miércoles, 20 de abril de 2016

Historia de Amor Inedita Nº 1

Era una día común y corriente, un chico universitario fue invitado a una reunión con sus amigos de estudio, fue en el apartamento de un viejo amigo suyo, se conocían desde hace mucho tiempo pues sus padres trabajaban, en aquel momento y hasta hoy, en la misma institución. El chico llego temprano para ayudar con la preparación del sitio, recopilar buena música, comprar algunos aperitivos y bebida para los invitados, aún sabiendo que todos iban a traer algo para compartir. La noche llego rapidamente y la reunión empezo, todo fue totalmente normal, bailaban unos con otros, disfrutaban de charlas tocando temas de anécdotas universitarios como: problemas con algunas materias, historias sobre encuentros con profesores, etc etc etc. y, tan rapido como empezo, la reunión llego a su fin, el chico despidió a algunas compañeros(as) en la puerta junto con su amigo, mientras que otros(as) se quedaban para dormir en las habitaciones del apartamento que, por lo dificil de conseguir una taxi seguro, prefirieron quedarse para irse la mañana del día siguiente. 

Todos los(as) que se quedaron, incluyendo el chico (aunque no acostumbraba a hacerlo) bebieron un poco más de la cuenta; a fin de cuentas solo tenían que quedarse a descansar hasta que llegara la hora de regresar a sus hogares. El chico y una de sus amigas, por equivocación o bendición de la vida, se refugiaron en la misma habitación hasta quedar dormidos; por supuesto sin darse cuenta, en camas separadas y sin ningún mal pensamiento. El frio era atroz, y al cabo del tiempo despertaron y se miraron a los ojos, como si despertarán al mismo tiempo buscandose el uno al otro, ella hablo sin decir una palabra, y solo con sus ojos y sus gestos invitó amablemente al chico a acostarse con ella, pues sospechaban que juntos podrían vencer el frio inclemente e insoportable para ambos y, sin darse cuenta y muerto de la pena, el chico ya estaba acostado junto a ella y para gusto de ambos, aquel frio fue disminuyendo poco a poco y la piel de ambos disfrutaba de una temperatura y una cálidez reconfortante y agradable.  

La situación aunque rara, inusual y embarazosa para ambos, que nunca pensaron encontrarse el uno al otro como algo más que amigos, se aferraron el uno al otro como si estuvieran destinados a estar juntos por ley divina. Él la abrazaba por la espalda, respirando sobre el cabello que descansaba sobre su cuello,  y empezaron a aflorar sentimientos que no creían tener, el calor se podía percibir en sus cuerpos y no comprendían ¿por que?, porque sentían esa una extraña atracción hacia el otro, no sabían si era química, hormonal o sentimental, pero era como si no pudieran controlar ese deseo mutuo que recorria sus cuerpos; pero tenían dudas, dudas de si el otro estaba sintiendo lo mismo y, nuevamente sin mencionar palabra alguna, él acaricia suavemente su mano a la altura del vientre y, como si estuviese esperando su señal, ella se voltea suavemente y entrelaza sus piernas con las de él para dormir abrazados frente a frente descansando su rostro sobre el brazo del chico... pero Él, nervioso ante la situación no pudo esperar más, nublo su juicio y sin pensarlo bajó su cara para mirarla a la altura de su pecho y... lentamente se acerco para besarla, ella... ella recibió aquel beso intenso lleno de deseo con ansias, el tiempo se detuvo y los besos continuaron como si quisieran sentir cada pequeño espacio en sus labios, manos y cuello, extendiendo ese sentimiento de placer a cada parte de su cuerpo, compartiendo el calor y la humedad que despredian al comerse el uno al otro, pues de alguna manera sabían que lo que estaban viviendo iba a quedar por siempre en sus memorias y, tal si fueran una pareja de enamorados, cayeron dormidos luego de besos, caricias y sonrisas compartidas.

Atte.
Zeus
Un saludo cálido y épico desde el Olympus.


1 comentario:

  1. y como dice mi amigo Jack K. "Tome las cosas con calma, porque si las comienza a tomar seriamente, llegan a su fin." By: L.H

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